Pbro. Héctor Pernía, mfc
Presentación:
(39) Este recurso es recomendado aplicarlo en las Unidades y en las Células Misioneras en las primeras sesiones de la Escuela Intensiva de Formación. Es útil, también, para cualquier miembro de la Iglesia Católica que desee darle respuesta a la pregunta: «¿Soy católico o protestante?»
Actividad:
(40) Para responder a la pregunta planteada, haremos a continuación, con todos los participantes un diagnóstico de nuestra fe; de manera semejante a un hospital, en el que a las personas se les hace una serie de exámenes para determinar su estado real de salud. En este caso, se busca saber y verificar: «¿Es verdad que soy católico y que no soy protestante?»; «¿Tendrá mi fe, alguna afección o presencia de doctrinas protestantes?»; «¿Estoy realmente en comunión con la Iglesia?»
Para el diagnóstico, cada participante toma una hoja en blanco, la divide en dos columnas trazando en el centro una línea vertical. Al lado izquierdo, en la parte superior, escribe la palabra “Católico” y a la derecha, la palabra “Protestante”.
Abajo encontrarás algunas expresiones o frases que contienen notas muy características de las doctrinas protestantes. Por cada afirmación irás marcando una “X” según sea tu caso. Si compartes esa afirmación debes colocar la “X” en la columna donde dice “Protestante”. Si no estás de acuerdo con esa afirmación, entonces marcarás la “X” en la columna “Católico (a)”.
Si en el pasado llegaste a pensar según algunas de estas afirmaciones, pon tu “X” en la columna “Protestante”, y al lado escribes la palabra ‘Sanado’.
- “Soy católico, pero no creo en el pecado original. Los niños no nacen con pecado”.
- “Soy católico, pero no estoy de acuerdo en que bauticen a los niños. Tienen que dejar que sean adultos, y que ellos crean y elijan”.
- “Soy Católico, pero no creo en religión. Eso no hace falta”.
- “Soy Católico, pero no me confieso con un pecador como yo. Yo me confieso, y me arrepiento directamente con Dios”.
- “Soy católico, pero no necesito ir a misas para salvarme o para ser un buen cristiano”.
- “Soy católico, pero no veo sino un simple pedazo de pan blanco. Eso es apenas un símbolo. Allí no está Jesucristo.”.
- “Yo soy católico, pero no creo en los curas. Eso, de los sacerdotes, es un invento que no está en la Biblia y fueron ellos los que mataron a Cristo”.
- “Yo soy católico, y no estoy de acuerdo, y no acepto, el matrimonio por la Iglesia. Eso ya está superado. Eso era para otras épocas”.
- “Yo soy católico, pero no creo en la Iglesia. Solamente, Cristo y la Biblia son suficientes”.
- “Yo soy católico, pero no creo en los santos. Yo no le pido a ellos. Yo le pido directamente a Cristo”.
- “Yo soy católico, pero no necesito de imágenes y de ir a procesiones, o de prenderle velas a los santos, para poderme relacionar con Dios. Eso es idolatría”.
- “Yo soy católico, y no creo en el Purgatorio. Eso no existe. Fue un invento de los curas para que la gente vaya a misa”
- “Yo soy católico y no creo que Jesucristo es Dios”.
- “Yo soy católico y no creo en la resurrección. Yo creo en la reencarnación.
- “Yo soy católico y no creo que María haya sido virgen. No tengo ningún problema que haya tenido más hijos con José.
Comentario sobre las respuestas:
(41) Luego de finalizado el listado se procede a invitar a ponerse de pie a quienes dieron positivo al menos en un rasgo dentro de la columna “protestante”. Se abre la posibilidad de que quienes lo deseen digan cuantas “X” marcaron, o en cuales puntos dieron positivo como “protestante”.
Análisis y reflexión: El facilitador va haciéndoles caer en cuenta, con estos ejemplos concretos, de una situación muy delicada dentro de la Iglesia; y es que una inmensa parte de los protestantes hacen vida dentro de la Iglesia Católica, que todavía están dentro, que aún no se han enterado de esto, y que aún no les ha llegado la hora para irse, porque esa hora y ese día se va madurando poco a poco. Hace tiempo que las alarmas y la emergencia deberían de haberse activado; hay muchísima gente desasistida, y también la hay indiferente, sin enterarse de cómo el protestantismo hizo nido, desde hace rato, dentro de la Iglesia.
Los católicos protestantes existen en abundancia dentro de la misma Iglesia Católica, y pueden estar entre aquellos que con mucha vehemencia dicen públicamente que son 100% católico Con el ejercicio anterior, vamos tomando conciencia de que las fisuras, las fracturas, el divorcio, la separación con la fe católica son reales en muchos de sus miembros; pero duermen guardadas muy silenciosamente por dentro, de manera semejante a un cáncer maligno que crece escondido y un día agarra de sorpresa afectando tanto a la persona que lo lleva dentro como a sus familiares y sus seres más cercanos.
Muchos católicos podemos estar llevando a ese protestante oculto, muy por dentro de nuestras vidas; repito, aún sin saberlo. Por eso, los ‘regresos a Casa’ a medida que más católicos van bebiendo de los nutrientes de la apologética católica son incontables.