Sábado, VI Semana de Pascua
Comentario
La liturgia de hoy es aleccionadora en cuanto a las verdades que debemos conocer como cristianos y que hemos de anunciar a toda persona. Nuestros hermanos esperados afirman que toda la Verdad necesaria para la salvación está en la Biblia y solo en ella (doctrina de la Sola Scriptura). Ellos creen que cualquier persona es capaz de interpretar la Biblia sin error y encontrar en ella la Verdad; pero, precisamente hoy, en la primera lectura, (Hch 18,23-28), se infiere que esto no es verdad; que existió, desde un principio, la Tradición, (1Cor 11,23; 2Tes 2,15), es decir, que hubo unos apóstoles que se encargaron de predicar el evangelio a viva voz, que se preocuparon y velaron por la integridad del verdadero mensaje evangélico, que fueron fieles a la Tradición apostólica y orientaron o solventaron las diferencias existentes entre los fieles. El depósito de la fe, es decir, la Sagrada Escritura y la Sagrada Tradición, fue confiado por los apóstoles a la totalidad de la Iglesia, a los pastores y fieles como una sola unidad, por eso la Biblia sola no basta, ella misma, así lo argumenta:
– En la lectura de hoy, Pablo estaba recorriendo las regiones para ”fortalecer a todos los discípulos.” (Hch 18,23). Es decir, él como apóstol, vela para que se transmita fielmente lo que escuchó y aprendió de Jesús.
– El eunuco, aun cuando no es ignorante, no entiende las escrituras y así se lo hace saber a Felipe para que se las explique. (Hch 8, 26ss).
– Así como Apolo, es tomado por Aquila y Priscila, para pulirlo en sus predicaciones (Hech 18,26), así mismo, la función del Magisterio es guiarnos para que no erremos.
– No todo está en la Biblia «Jesús hizo muchas otras cosas. Si se escribieran todas, creo que no habría lugar en el mundo para tantos libros». (Juan 21,25)
– El primer evangelio escrito fue el de Marcos y fue alrededor del año 60, es decir, que todo era por Tradición, de hecho Pablo dice: «os alabo porque en todas las cosas os acordáis de mí que conserváis la Tradiciones que les he transmitido».
Y de acuerdo a la historia, en el siglo I los cristianos se reunían en comunidades locales, llamadas Iglesias. Las cuales no eran independientes sino que se reconocían unas a otras como parte un mismo pueblo. Y así lo demuestra Pablo, quien dispone que su carta a los Colosenses sea leída en Laodicea, y que en Colosas se lea la carta que él envió a los laodicenses (Col 4, 16). La interpretación de la Biblia ha de hacerse bajo la orientación de la Iglesia para evitar ser un ciego guiando a otro ciego, ya que sino los dos caerían al abismo. (Mt. 15,14)
Para compartir:
1.- Menciona otros versículos donde se mencione o use la Tradición.!
Elaborada por:
Adelina Ruiz mfc
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