A continuación, respuestas a una serie de preguntas que un miembro de una secta protestante publicó para atacar, como de costumbre, a los católicos, sobre la Virgen María. Me sorprendió enormemente, que entre tantas preguntas y objeciones ninguna fue contra su Virginidad.
Aunque el escrito está enfermo con la falsa doctrina de «LA SOLA BIBLIA BASTA» (en ninguna parte de la Biblia aparece) ya que le falta tomar en cuenta la Tradición y el Magisterio de la Iglesia que completan la Revelación, le responderé solo con textos bíblicos.
Al borde izquierdo del texto, veremos lo que escribió el protestante; y, justificado con una sangría a la derecha, lo que respondo a sus preguntas y ataques a María.
Su servidor,
Padre Héctor Pernía, mfc
¿Dónde dice la Biblia que María es puerta del cielo? Jesús es la puerta (Juan 10:9)
¿Por qué María es la puerta del cielo? Lee Lc 1, 34. María es la puerta por la cual Dios entró al mundo, gestado en sus entrañas como verdadero hombre, para que el hombre pudiera encontrar y pasar la Puerta de la Salvación, que como muy bien lo recuerda el hermano protestante, la Puerta para salvarse es Cristo (Jn 10, 7.9). Pero, que no se le pase por alto al leer la Biblia que la puerta mediante la cual Cristo vino al mundo fue María. Debería ser agradecido con ella.
¿Dónde dice la Biblia que María es nuestra Señora, si ella se consideró la sierva del Señor?* (Lucas 1:38) En el culto cristiano solo hay un Señor, no hay Señora.
María, traducido al hebreo, significa «señora». El hermano protestante, siempre que dice María está diciendo señora. Espero que su mamá no se llame María porque le estará diciendo todos los días señora.
En Ap 12, 1 María aparece para encima de la luna, vestida del sol y coronada de estrellas por ser la Madre del Rey y Señor del Universo, JESUCRISTO; y además, indica que ella está por encima de la luna, señora sobre la luna, porque así creo Dios al hombre y a la mujer, les dio señorío sobre la creación (cf. Gn 2, 19-20; Salmo 8).
Se le puede decir señora a una mujer. Léase en la Biblia: Gn 16, 4. 7-9 (Agar a Sara), Is 24, 2.
¿Dónde dice la Biblia que María es la Reina del cielo? Solo el Dios trino es el Rey del cielo (Daniel 4:37; 2 Timoteo 4:18; Apocalipsis 17:14)
La Virgen María es Reina porque su Hijo Jesucristo es Rey (Jn 18, 37; Ap 19, 16). Ella es reina por su Hijo Jesucristo y no al revés, pero igualmente es Reina. No por méritos de ella, sino por méritos de su Hijo. Pero, el punto es, que es reina.
El protestante anda negando que Cristo es Rey por estar negando que su madre María es reina, porque, lo que de una madre se niega también se niega del hijo. Que fulana no es madre del alcalde.. Entonces significa que el hijo, al que hacen alusión, no es ningún alcalde.
El ataque no se lo hace a la madre sino al hijo, ya que es por Cristo que María es reina. Y ese ataque no parece que viniera del protestante, sino del dragón (Ap 12, 1-17) (el demonio) que odia a la Mujer que dio el Sí al Señor, a la mujer coronada de 12 estrellas por ser la Madre del Rey del Universo y la madre del Rey de las 12 tribus de Israel y de la nueva Israel: la Iglesia edificada sobre 12 apóstoles (Mc 3, 16-19), con Pedro a la cabeza (Mt 16, 13-19; Jn 21, 15-17).
¿Dónde dice la Biblia que María es mediadora en el cielo? Jesús es el único mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5; Hebreos 9:15)
María es intercesora ante su Hijo de las necesidades del hombre (Jn 2, 1-9). Debe leer el mismo capítulo completo de 1 Tim 2, 1-8, y darse cuenta que es mandato divino que todos oremos los unos por los otros, y que lo hagamos con las manos limpias, es decir, sin pecado, en lo que no hay nadie más Inmaculado que la virgen María. Y ella no es la única. En el cielo hay millares de justos, y en St 5, 16 dice que la oración del justo tiene mucho poder. La oración de Cristo es todo poderosa, pero la oración de los justos que vivieron santamente y están con el en la gloria, también oran, y sus oraciones son poderosas. Tanto, que el demonio atacó a Job para intentar hacerle dudar de eso exactamente. Véase en Job 5, 1.
Que Cristo es el único mediador, se refiere es a otra cosa bien diferente. Las sectas tergiversan y tuercen su significado real, que lo indica justo en el verso 6 cuando dice: «QUE SE ENTREGÓ A SÍ MISMO COMO RESCATE POR TODOS. Este es el testimonio dado en el tiempo oportuno» Pablo le está ordenando a los judíos que abandonen los antiguos sacrificios de animales primogénitos, porque ya el tiempo oportuno de la salvación llegó, la plenitud de los tiempos ya se cumplió, y para siempre quedó el único y definitivo sacrificio de Cristo en la cruz que quedó instituido para siempre, como culto para el cristiano, en el memorial de la Eucaristía (Lc 22, 11-19; 1Co 11, 23 – 26; Hb 9, 25-27; 10, 1-14).
¿Dónde dice la Biblia que María es nuestra abogada? JESÚS es nuestro abogado ante el Padre (1 Juan 2:1)
Esto se le acabó de responder cuando se explicó que María, y todos los Santos interceden por nosotros ante Dios y Cristo es Dios. Y lo pueden hacer, además, POR PARTICIPAR EN EL CUERPO DE CRISTO, ya que EL CUERPO DE CRISTO ES LA IGLESIA (1 Co 12, 13-29; Rm 12, 4-5; Ef 1, 22-23; Col 2, 18-20). María es mediadora por PARTICIPACIÓN en el CUERPO DE CRISTO.. Cuando Cristo se inmola (MEDIADOR) para salvarnos lo hace ENTERO, su Cabeza (Él) y su Cuerpo (la Iglesia), y MARÍA, su madre, es el miembro de su CUERPO MEDIADOR más excelente. Negar que María es mediadora es ignorar y desconocer el CUERPO DE CRISTO, vivo, formado por todos los bautizados en la única Iglesia que Él fundó.
¿Dónde dice la Biblia que María es la ‘Divina´ (de Deidad) Pastora? Salmo 23:1, Juan 10:11, Dios es nuestro divino pastor.
María, la madre de Cristo Es PASTORA porque trabaja pastoreando al pueblo de Dios, ayudando a su Hijo Jesús con el rebaño, con su dulce corazón de madre amorosa. El Evangelio de Juan nos enseña que al pie de la cruz María recibió la orden de parte de Jesús de ser nuestra madre espiritual así mismo sus discípulos recibieron la orden de adoptarla (Jn 19, 16-27), ella sufrió junto a su Hijo para salvarnos (cf. Jn 19,25ss). La Divina Pastora es la madre de Jesús que sigue su labor, cumpliendo el mandato de su hijo, de ser nuestra querida madre y nosotros seguimos la orden de ser sus hijos.
Esa labor de pastora es DIVINA porque se refiere a las cosas de Dios, a las cosas divinas, su labor pastoril está relacionada con lo divino, con las cosas divinas. No significa que ella sea una persona divina, ella es humana, sino que su labor está relacionada con las cosas divinas.(1)
¿Dónde dice la Biblia que debemos orar a María? Debemos orar al padre solo en el nombre de Jesús (Juan 14:13; 16:23)
Primero. La Biblia no dice. La forma correcta es, «en la Biblia dice», porque la Biblia no es Dios. Ella no habla. Dios es uno solo en tres personas distintas, y ninguna de ellas es la Biblia. Las tres personas son PADRE, HIJO Y ESPÍRITU SANTO.
Segundo.. Estamos de acuerdo que orar es hablar con Dios. Es dirigir el pensamiento a Dios. Sin embargo, en la Biblia tenemos, también, la doctrina de la intercesión. Dios no está solo en el cielo. El cielo no está vacío, tal como las sectas lo entienden al asegurar que los Santos no existen, que no pueden hacer nada, que no pueden interceder porque según ellos están muertos. Tal doctrina es falsa y diabólica. Porque vemos en la Biblia que en el cielo hay millares incontables de Justos (Ap 7, 9), que no están muertos (Mc 12,26-27; Lc 20,38), que son los Santos, que ellos interceden (Ap 5, 8; 6, 9-11; 8, 4) y que sus oraciones tienen mucho poder (St 5, 16).
Tercero, ORAR se puede entender también como, dirigir súplicas a esos justos que están en el cielo, o que aún habitan en la tierra, para pedirles su intercesión ante Dios, tal como se evidencia en el libro de Job, en dos pasajes: Job 5, 1; 48, 1-2. Veamos el primer texto desde la Biblia de las sectas, la Reina Valera. El demonio fue a atacar a Job diciéndote: «Ahora, pues, da voces; ¿habrá quien te responda? ¿Y a cuál de los santos te volverás?»
¿Dónde dice la Biblia que María fue sin pecado? María fue transmitida por generación natural, y en Adán todos pecamos (Romanos 3:23; 5:12,16;18-14 ), excepto Cristo que fue por Obra y gracia del Espíritu Santo. Ella necesitó de un Salvador (Lucas 1:47). María presentó un sacrificio por expiación del pecado, según lo hacian todas las madres judías que concebían (Lucas 2:22-24, ver Levítico 12)
En la misma traducción bíblica Reina Valera, leemos que Dios le anunció a la serpiente la venida de una mujer y su simiente (hijo) que le iban a aplastar su cabeza: «Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar». (Gn 3, 15). Se refiere a María y a Jesús. Ambos vencerán a Satanás, Jesús y su madre María. El demonio no podrá hacer con María lo que hizo con Eva: hacerla pecar.
Que María naciera inmaculada, es decir, sin pecado, era necesario. De ella haber nacido pecadora, Jesús su hijo, habría nacido pecador, pues está escrito en uno de los Salmos: «He aquí, en maldad he sido formado,Y en pecado me concibió mi madre». (Sal 51, 5). De cual pecado estamos hablando, del pecado proveniente de nuestros primeros padres en el Paraíso, según lo leemos en Rm 5, 12-19. María hubiese necesitado del Salvador, que le perdonara sus pecados, solo si ella hubiese cometido pecados. En la Biblia no hay evidencia de ningún pecado en ella. Más bien, en la misma traducción Reina Valera dice que ella fue hallada por Dios en gracia (Mt 1, 30, que es bendita entre las mujeres (Lc 1, 28. 42), y que todas las generaciones la llamarán buenaventurada (Lc 1, 48). Buenaventurada quiere decir, que goza de ver a Dios, de estar con Dios. Si hubiese vivido y fallecido en el pecado eso habría sido imposible, porque ningun difunto muerto en el pecado puede ser buenaventurado, ver a Dios.
Lucas 2, 22-24, y Levítico 12 no demuestran que María sea pecadora por lo ya explicado. Que ella y José hayan ido a ese rito es lo más normal por tratarse de un precepto que como todo los judíos debían cumplir. Ella pudo hacerlo estando Inmaculada, tal como Jesús se hizo bautizar por Juan en el río jordán, y no por eso era pecador. El protestante que ande diciendo que María fue pecadora, que muestre con la misma Biblia, un solo pecado que ella haya cometido.
¿Dónde dice la Biblia que María es la esposa del Espíritu Santo? Es una herejía, porque María no se casó con el Espiritu Santo, el Espíritu hizo un milagro en su vientre sin consultar con ella si quería o no, porque Dios hace como le place. María Estaba desposada con José y llegó a ser su esposa ( Mt 1, 24).
Cuando el ángel Gabriel hizo el anuncio a María ella todavía no estaba embarazada. El ángel le anunció que ella iba a quedar embarazada, lo que significa que ella también pudo haberse opuesto. Ella se unió a Dios por voluntad propia, libremente, sin coacción. Aunque Dios no le consultó, sin embargo por ley natural, al ella aceptar el embarazo, se convirtió en su esposa porque una mujer, a los ojos y en el plan de Dios, pasa a ser esposa del que la embarazó, y solo la puede embarazar después el mismo que la embarazó primero. Una forma así de presentar a Dios como la que tiene el hermano protestante, de que – según él, Dios hizo el milagro en su vientre sin consultar con ella o no, porque Dios hace lo que le place, deja un sinsabor oscuro sobre ese “tal dios que impone y hace las cosas aún sin avisarle antes a la mujer que va a embarazar, suena parecido a la clase de hombres mundanos que embarazan mujeres sin que ellas les importe en lo más mínimo, que las usan y las deshechan. Algo así es la imagen que ellos muestran del dios en el que ellos creen respecto a María. Un Dios muy diferente al verdadero, quien le envía un ángel de su parte para hablar con ella, anunciarle lo que iba a suceder, infundir en ella la fe poniéndole como ejemplo lo acontecido con Isabel. La forma tan bella, pedagógica y respetuosa como el ángel le dice las cosas hace que María se le entregue a Dios voluntariamente: “He aquí la esclava del Señor, hágase conmigo según tu palabra”, y el ángel se fue de su presencia. Podemos apreciar aquí el pleno consentimiento de María y no la imposición déspota y fría de quien la embarazó. Es sumamente extraño y raro ese concepto que los protestantes tienen del dios en el que creen: mundano, machista, que hace con las mujeres lo que les place: las embaraza ignorándolas y haciéndolas a un lado después. El mismísimo demonio con disfraz de “Dios”.
Es decir: María es esposa de Dios porque Dios la eligió, la hizo suya, le hizo un Hijo. Era lo más normal de la época, que una mujer pasara a ser esposa porque la elegían. El padre la cedía al que se la aceptaba entregar. En todo caso, el que aceptaba no era la mujer sino su padre.
Dios fue más esposo de María que José, porque José fue su esposo solo legalmente, ante las leyes judías, para proteger que ella y el Niño en su vientre fueran apedreados, ya que José decidió dejarla secretamente (Mt 1, 19).Era del todo exponer a María al repudio y a la lapidación si más adelante, en cualquier momento, ese secreto se hubiera hecho público. María habría quedado difamada públicamente como una posible prostituta porque al ella intentar dar explicación de que el niño lo había tenido por obra del Espíritu Santo, ¿quién se lo iba a creer, con lo tercos y duros de cabeza que eran los judíos? Dios protegió a María de tal choque con los judíos revelando ese anuncio en su vida pública, de modo que fue Él quien fue llevado a la crucifixión por haberse declarado Hijo de Dios. Por todo eso, era necesario que ante las autoridades judías hubiese un PADRE PROTECTOR PARA EL NIÑO JESÚS y un ESPOSO PROTECTOR PARA SU MADRE MARÍA: SAN JOSÉ.
José fue el PROTECTOR para María y el Niño en su seno, porque el ESPOSO CELESTIAL de María así se lo pidió en Mt 1, 20-21: «José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».
Fue más esposo Dios porque entró en su intimidad y le engendró un hijo. Lo que no hizo José. De haberle engendrado hijos José a María, éstos, o al menos uno de ellos, debió ser mencionado en cualquiera de las dos genealogías, en Mt 1 o Lc 3.
¿Oró alguien a María en las Escrituras?¿ Hay un ejemplo? En Caná un relato histórico y narrativo estando ella en ese momento , informa que falta vino más no intercede. Aunque muchos informaron a Cristo sobre una necesidad y no por ello se dice que son mediadores entre el cielo y la tierra , como el centurión que para ser más explícito dice que le rogó a Jesús por el siervo (Mateo 8:5-10) o la mujer que le intercedió a Jesús por su hija ( Mateo 15:21-28), no por ello le pedimos a ellos. El único precepto en el relato es que María dijo » Haced todo lo que os dijere» (Juan 2:5). Manda a que todos vayan a Jesús, así como en todo el relato evangélico él manda que vengan solo a él.
Ya la respuesta a este punto se le dio párrafos atrás con los tratados teológicos que se le recomienda que haga… Sin embargo, vamos a ayudarle con responder a otros detalles nuevos que nos trae como objeción.
Aunque dice que ella solo informó a Jesús que el vino se había acabado. ¿Aparece en el texto bíblico la frase que diga que ella solo informó a Jesús? ¡NO! Es una afirmación del protestante y no bíblica. En el versículo cinco del texto dice que María ordenó a los sirvientes: “HAGAN LO QUE ÉL OS DIGA”. El sentido común lleva a reconocer que María habló con su hijo para pedirle que hiciera algo, y no simplemente para informarle que el vino se había acabado. El hecho que ella le dijera de modo imperativo a los sirvientes que obedecieran a Cristo deja evidente que ella no se limitó con informar a su hijo sino que de algún modo le pidió que hiciera algo, porque. El protestante debería responder lo siguiente: Si estaba Jesús en aquella boda presente junto a los discípulos , ¿por qué el mayordomo, que se supone es que está pendiente que nada falte y tiene información de quiénes son los que están presentes en la boda, no fue a Jesucristo a pedirle que solucionara? .Porque, simplemente el mayordomo no conocía a Cristo, como tampoco, los demás que estaban en la boda. Solo había alguien que sabía quién era Jesús, y de lo que Él era capaz. Esa mujer se llama María, su madre. Así es el mundo: la mayoría no conoce a Jesús tal como María, y ella va a su Hijo a pedir por tantos millares que no lo conocen, pero que necesitan igualmente de sus misericordias.
Ya que mencionó el caso del centurión romano y el de la curación de la hija de la mujer cananea (Mateo 8,5-10) Qué bueno que lo hizo, porque así usará su propia medicina para curarse. El centurión romano intercedió ante Jesús por su siervo que estaba enfermo y la mujer cananea lo hizo por su hija que estaba endemoniada.. Si se aplicara la doctrina protestante que sataniza las intercesiones humanas y reconoce solamente el ir directamente a Jesucristo, el centurión no debió jamás mandar a unos servidores suyos a pedir la ayuda de Cristo por su siervo enfermo, sino que debió más bien decirle al siervo que hiciera un poco de sacrificio y fuera a ver a Cristo; y, si el siervo le hubiera pedido el favor que fuera a interceder por él, seguro que el centurión le hubiera aplicado la doctrina protestante: ¡”No me pongas de intercesor por ti. Debes tú mismo ir a pedirle a Cristo que te ayude! Más complicado habría sido con la mujer cananea y su hija que estaba poseída (Mt 15, 21-35). ¿Cómo iba a poder su hija ir directamente a Cristo en ese estado? Obligatoriamente necesitaba la ayuda de otra persona que intercediera ante Él, y, ¿quién mejor que su propia madre? Ni el centurión, ni la mujer cananea le dijeron a Jesús, “interceda ante Dios”, sino que le pidieron directamente a Cristo la ayuda porque Cristo, en persona es Dios, y así Dios, en persona actuó y socorrió.
El hermano protestante que redactó esta carta de ataques a la Virgen María y a los católicos debe revisar y conocer el significado y contenido bíblico y teológico de la doctrina sobre CRISTO ÚNICO MEDIADOR, porque la tiene muy deformada y adulterara. La desconoce. Le anda diciendo naranjas a los mangos. También necesita hacer un breve curso de Cristología sobre la doctrina del CUERPO MÍSTICO DE CRISTO. De no hacerlo seguirá como anda: un extraviado que anda extraviando fuera de Cristo a los incautos ignorantes que le crean sus fantasías y su falso evangelio. También se tiene que preguntar ¿por qué su ensañamiento contra María y contra los católicos que se reconocen hijos de esta mujer, se sitúa en forma tan lineal y directa con el dragón que se menciona en Ap 12, que fue a hacer la guerra hacia la mujer que dio a luz al Salvador del mundo, y, al no poder con ella, fueron a hacerle la guerra a sus hijos, a los que la reconocen y aceptan como madre, a los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” (Ap 12, 17)?.
¿Es acaso María divina , omnipresente y omnisciente para oír Miles de oraciones?
María no es omnipresente, porque omnipresente solo es Dios. Pero María, y todos los Santos de Cristo, sí son miembros del Cuerpo de Cristo (1 Co 12, 13-29; Rm 12, 4-5; Ef 1, 22-23; Col 2, 18-20), y Cristo está en todas partes, porque su presencia es espiritual y a eso no le hace límite ni obstáculo alguno la temporalidad de nuestra corporeidad. Eso permite que todos los miembros del cuerpo de Cristo nos podamos comunicar, desde cualquier lugar. ¿Quién lo hace posible? JESUCRISTO. ¿Gracias, y por medio de quién? De JESUCRISTO.
Los Santos son los Testigos de Cristo más excelentes, y como una nube, por lo incontables, ellos son, y ESTÁN EN TORNO NUESTRO estimulandonos con su ayuda y su testimonio, a que también nosotros nos lancemos a alcanzar la meta de la santidad y la salvación. Esto no lo estoy inventando
En la misma Biblia Reina Valera lo dice claramente: «Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante (Hb 12, 1).
En línea con la anterior respuesta, este hermano protestante necesita hacer un curso teológico sobre la doctrina del CUERPO MÍSTICO DE CRISTO y, también, de ECLESIOLOGÍA, ya que demuestra por lo que escribe en esta objeción que no conoce, ni siquiera bíblicamente a Cristo y la Iglesia. No la «iglesia» a donde él asiste, sino la que encontramos en la Biblia, la que Cristo fundó. Le serviría de grandísima ayuda si dedicara unos meses de profundo y objetivo estudio a textos bíblicos como: 1 Co 12, 13-29; Rm 12, 4-5; Ef 1, 22-23; Col 2, 18-20.
¿Manda Dios a dar culto religioso (llámese adoración o veneración) a alguna criatura?
¡Muy buena la pregunta!. Le completaría la palabra ‘alabanza’ y ‘honra’ a la de culto, para que entienda que un acto de alabanza a un siervo o una sierva de Dios no es de ningún modo IDOLATRÍA.
Que abra su propia Biblia Reina Valera y corrobore lo que le estoy diciendo haciendo, sin prejuicio anti católico alguno, un estudio serio y objetivo de los siguientes textos bíblicos: Prov 31, 28-31; Lc 1, 28. 48; Hb 11, 32-40; 1Co 11, 2; 12, 13-27; Rm 2, 10-11; 13,7; 1Pe 2, 17.
Elizabeth le llamó a María la madre de mi Señor (Lucas 1:43). El pronombre posesivo mi , da a entender que la honra se da a la criatura que lleva en el vientre y no a ella. Es correcto decir que María es la Madre de aquel que es nuestro Dios, y no madre de Dios. Melquisedec es un tipo de Cristo, pero Jesús es el antitipo. Jesús como Dios es sin padre , ni madre sin genealogía (Hebreos 7:3) , es el creador de todo incluyendo a María misma (Juan 1:1-3).
Muy bien, que diga que Jesús es creador de todo incluyendo a María misma. Pero, algo en sus neuronas no le funcionó cuando expone una aberrante redacción e inferencia sin sentido ni coherencia ni sintaxis alguna. Niega lo que primero él mismo afirma. Afirma que María es madre de aquel que es nuestro Dios y luego dice que no es madre de Dios. Cantinflas hablaba con más sentido que este hermano protestante. A fin, ¿en cuántos “Dioses” cree? Uno: “AQUÉL QUE ES NUESTRO DIOS”, y ¿el otro? ; “NUESTRO DIOS”. ¿Acaso el primero y el segundo no son la misma Persona? ¿el mismo y único Dios? Pareciera estar leyendo a alguien recién internado en un psiquiátrico que no coordina lo que dice. Lo que primero acepta, enseguida lo rechaza, como quien escupe una comida o bebida que metió a su boca. Decir; «la madre del que es nuestro Dios», es exacto a decir «la madre de Dios». Se está haciendo una ensalada mental y doctrinal al insinuar que Aquel que es nuestro Dios es otro diferente a Dios. Es una ridiculez presumir que un halago de Isabel a María era un peligro porque le podría quitar honra al Hijo que ella llevaba en su seno.
Una mujer le dijo a Jesús una vez: (Biblia Torres Amat (versión Católica). Lucas 11:27-28: 27. Estando diciendo estas cosas, he aquí que una mujer, levantando la voz de en medio del pueblo, exclamó: Bienaventurado el vientre que te llevó, y los pechos que te alimentaron. 28. Pero Jesús respondió: Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios, y la ponen en práctica. Durante este evento quizá, hubiera sido una excelente oportunidad para Jesús darle una respuesta positiva de gran exaltación como argumento válido para dar culto a su madre, pero él no lo hizo. Porque está escrito: Biblia de Jerusalén 1975. Mateo 4:10: … Al Señor tu Dios adorarás, y sólo a él darás culto» Versión Israelita Nazarena
Ro 1:25: «Ellos cambiaron la verdad de Elohim por la mentira, y veneraron y rindieron culto a las criaturas antes que al Creador , quien es bendito para siempre. Amén.» Jesús puso a su familia espiritual por encima de su familia terrenal: (Mateo 12:46-50: 46. Mientras él aún hablaba a la gente, he aquí su madre y sus hermanos estaban afuera, y le querían hablar. 47. Y le dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están afuera, y te quieren hablar. Respondiendo él al que le decía esto, dijo: ¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? 49. Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. 50. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre.
Es una falta de respeto que haga publicaciones con tan graves sin sentidos en las cosas que escribe. ¿Quién le dijo que si Jesús hubiese exaltado a María la hubiese catalogado como diosa? ¿De donde saca tan estúpido razonamiento? Y perdón por la palabra. Para que sepa ,que JESÚS EXALTÓ EN NUMEROSAS OCASIONES A PERSONAS SIN QUE POR ESO LAS PUSIERA EN EL LUGAR DE DIOS: la mujer cananea (Mt 15, 28), Natanael (Jn 1, 47); el centurión romano (Lc 7, 9). Rendirle exaltación a personas que se lo merecen no es prohibido por Dios, sino todo lo contrario. Léase en la misma Biblia Reina Valera en Prov 31, 29-30: “Muchas mujeres han hecho el bien,mas tú las sobrepasas a todas. 30 Engañosa es la gracia y vana la hermosura;la mujer que ateme a Jehová, esa será alabada”. Si lo dice en la misma Biblia que ellos usan, ¿por qué no le obedecen a Dios? Por qué no lo cumplen? ¿Acaso la Virgen María no es la mujer más digna de merecer y recibir el cumplimiento de ese pasaje de la Biblia? Además, añádase lo que San Pablo ordena en Rm 13, 7: “Dad a cada cual lo que se le debe: a quien impuestos, impuestos; a quien tributo, tributo; a quien respeto, respeto; a quien honor, honor”. Denle honor, tributo y respeto a María por ser la madre de Cristo, porque así lo hizo el ángel Gabriel cuando se le presentó para el anuncio de la encarnación. El ángel utilizó un término que antiguamente era utilizado para saludar y rendir homenaje a la realeza, y que la misma Biblia Reina Valera lo trae en Lc 1, 28: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres”. Y la saludó, tal como se le saludaba a la realeza, inclinándose ante ella, porque estaba ante la elegida para ser la única madre del Rey de Reyes y Señor de Señores, Jesucristo.
El texto que usa el protestante para atacar las alabanzas a María y decir que Jesucristo más bien la despreció, se vierte en su contra, porque lo que Jesús respondió, exactamente corona a su madre María como el más perfecto de los ejemplos a seguir e imitar. De ella, mejor que de más nadie, se puede aplicar lo que Jesús respondió a quien lo felicitó “por el vientre que lo llevó y por los pechos que lo amamantaron”: Jesús les dijo: “Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios, y la ponen en práctica”. Cristo los reprocha porque se fijan en lo menos importante y admirable de su madre, lo carnal entre ella y él, y olvidan e ignoran lo más sublime y hermoso de ella para con él: su escucha y obediencia perfecta a su Palabra. Con eso la ratifica como madre suya. Y no por exaltarla en lo espiritual, está menospreciando su filiación carnal de María; pues de serlo así, Cristo sería un desagradecido mal hijo que no agradece a la madre que le concibió, que le cargó, que lo protegió de Herodes, que lo amamantó. Así es el dios en el que creen ellos: un dios que enseña con su mal ejemplo a despreciar y negar la propia madre. ¿Es ese el Dios único y verdadero? ¡NO! A continuación te mostraré como es el trato que en los 10 Mandamientos, el Dios verdadero ordena darle a la propia madre terrenal: “Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus días sobre la tierra que Yahvé, tu Dios, te va a dar” (Ex 20, 12).
Al final, al que mal pone diciendo que Jesús despreció a María, no es a María sino a Cristo. Nada nos sorprende que aparezca por acá el demonio disfrazado de cristiano para atacar a Cristo mediante indirectas, lanzando sus dardos de veneno contra su madre María, pues lo que se niega de la madre se niega del hijo que parió.
María es llamada «Bendita entre todas las mujeres» por ser elegida por pura gracia para ser la madre de Jesús (Lucas 1:28, 42). Muchas mujeres fueron elogiadas de manera similar, como también Jael es llamada Bendita entre las mujeres, en Jueces 5:24, o la mujer que dice que sería recordada dondequiera que se predicara el evangelio por derramar el ungüento a Jesús (Mateo 26:13). Todos son modelos de fe, pero no objetos de veneración o culto religioso.
María halló gracia » _favor no merecido»_ delante de Dios (Lucas 1:30) , como todo pecador lo halló. Noé (Génesis 6:8), Moisés ( Éxodo 33:12-13), David ( Hechos 7:46), Pablo (1 Corintios 15:10) y todos nosotros .
¡Quien lo entiende…! Si párrafos atrás nos vino con el cuento de que las exaltaciones solo se le pueden dirigir a Dios, porque si le hacía a personas eso era idolatría; ahora resulta que él mismo nos trae una lista de pasajes bíblicos con personas que fueron exaltadas por el mismo Dios. Búsquese la palabra veneración en Diccionario de la Real Academia, dado que no conoce los sentidos o significados que esa palabra tiene. Aquí se los traigo para ahorrarle tiempo:
a) Respetar en sumo grado a alguien por su santidad, dignidad o grandes virtudes, o a algo por lo que representa o recuerda.
b) Dar culto a Dios, a los santos o a las cosas sagradas.
Ese hermano protestante, que primero mire la viga que tiene en el ojo, antes de señalar basuritas en los ojos de los católicos. Atacan las alabanzas y la honra que los católicos le rinden a los Santos, pero miran a otro lado cuando en sus lugares de reunión, las sectas tratan a sus líderes tal cual como al mismo Dios. Fijense como tratan a su fundador, Eusebio Joaquín Flores los miembros de la Luz del Mundo.
Que vaya primero a soltar su discurso anti exaltación y anti veneración de hombres en las mismas organizaciones que dicen ser las únicas cristianas. Por la parte católica, ya le entregamos con lujo de detalles textos bíblicos que demuestran que las alabanzas a siervos de Dios no son idolatría, pero por si no le alcanzan, le dejo otras de ñapa, donde Dios mismo da alabanza y gloria al hombre de dos modos: Uno, universalmente, revelando la dignidad y grandeza del hombre; y el otro, de modo particular, resaltando de modo específico la gloria de algunos de sus siervos: Gn 12, 1-3 (Dios prometió a Abraham la gloria); Gen 27, 26-31 (Isaac ungió y consagró para Dios a Jacob diciendo: “Sírvante pueblos, adórente naciones, sé señor de tus hermanos y adórente los hijos de tu madre. ¡Quien te bendijere, bendito sea! ¡Quien te maldijere, maldito sea! Así concluyó Isaac de bendecir a Jacob; Sal 84, 12 (el Señor dará gracia y gloria a quienes marchan rectamente); Sal 8 (Dios coronó de gloria al hombre haciéndolo señor – administrador de la creación; Rm 5, 2 (Nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios, y nos gloriamos hasta en las tribulaciones); Rm 8, 17-18 (Compartimos los sufrimientos de Cristo, para ser también con él glorificados. Porque estimo que los sufrimientos del tiempo presente no son comparables con la gloria que ha de manifestarse en nosotros); Rm 8, 30 (A los que predestinó, a ésos también los llamó; y a los que llamó, a ésos también los justificó; y a los que justificó, a ésos también los glorificó); 1Pe 5, 4 (recibiremos la corona de gloria que no se marchita); Col 1, 11 (fuertes; fortalecidos por la gracia de Dios); 1Co 12, 24-26 (hay miembros del cuerpo de Cristo – bautizados – que reciben honores, y todos se alegran, menos los de las sectas protestantes, porque no son de la Iglesia de Cristo. No se alegran por rabia y envidia del demonio que los gobierna y dirige); 2Ts 1, 10 (Jesús será glorificado en sus santos); 2Ts 1, 12: “Qué Jesús sea glorificado EN USTEDES y USTEDES en JESUCRISTO; Eclo 10, 20: “entre hermanos se honra al mayor; pero el Señor honra a los que lo temen.
En resumen: las sectas se enfurecen contra el culto de alabanza a los Santos de Dios porque – dominados por el maligno – no soportan que los hombres reciban lo que su Dueño perdió, la gloria que Luzbel poseía ante Dios, antes de ser precipitado a los abismos: Jn 17, 5. 22-24: Jesús oró al Padre diciendo: “Yo les he dado la gloria que tú me diste…” El demonio le tiene envidia al hombre redimido por Cristo, porque fue coronado de la gloria de la eternidad que el demonio perdió; pero como el demonio no tiene boca para vomitar esa rabia e ira, lo hace mediante la boca de los que él utiliza como obreros suyos: las Sectas protestantes. Sus miembros atacan el culto a los santos porque eso ya había sido anunciado por Cristo, cuando nos advirtió las señales de los apóstatas que renegarían de la fe por no aceptar el amor a la verdad, y por dejarse seducir por falsos milagros y prodigios engañosos. En 2Ts 2, 3-4 dijo San Pablo: “Que nadie os engañe de ninguna manera. Primero tiene que venir la apostasía y manifestarse el Hombre impío, el Hijo de perdición, el Adversario que se eleva sobre todo lo que lleva el nombre de Dios O ES OBJETO DE CULTO”. Por eso es tanto el ataque de las sectas a los Santos, a las celebraciones cristianas en su honor, hacia las imágenes sagradas, y especialmente, hacia la Eucaristía y la Virgen María.
Es interesante notar que Jesús no llamó a María con el nominativo» *madre* «, siempre se refería a ella como mujer (Juan 2:4, 19:26) , lo cual es un símbolo de respeto y distanciamiento entre su posesión de él como su Señor . María debía reconocerlo no tanto como el hijo a quien había criado , si no como el mesias prometido y al Hijo de Dios.
En relación al por qué Jesús usa el término MUJER para referirse a María, y no menciona la palabra MADRE en la Sagrada Escritura, es motivado por la unidad teológica que se desprende entre el protoevangelio, en Gen 3, 15 (la Mujer y su Linaje que vencerán al maligno, con la Mujer y su Hijo de Ap 12, 1-7, a quienes el demonio – el dragón – persigue para acabar con ellos en cuanto el niño naciera pero no pudo. Es coherente y explicable, por tanto ,que Cristo, en su Divinidad, que gobierna y dirige la Historia de la Salvación, al llegar a la plenitud de los tiempos, no se presentara solo al mundo,y entre los hombres, sino que lo hiciera acompañado de la MUJER, y la reconociera y presentara así ante los demás en las ocasiones que fueran propicias: en las bodas de Caná, haciendo ver a la Mujer ayudando a su Simiente a entrar en la vida pública, en el anuncio del reino, manifestando su primer milagro: HAGAN LO QUE ÉL LES DIGA. Es como si antes ella le hubiese pedido a su Hijo: HAZ LO QUE ELLOS TE PIDEN. ¡AYÚDALES! ¿Por qué? Porque así es como funcionan las madres con los hijos y el plan que Dios tiene para ellos: las madres los guían y ayudan a hacer su deber; los impulsan siempre cuando de dar el primer paso se trata y ellos, en lo humano, sienten algo de temor de lanzarse; pero, con la fuerza educadora de la palabra de su madre, se animan y emprenden su madurez, su crecimiento, y su entrada a asumir las responsabilidades que les corresponde según su proyecto de vida.
El hecho de que en varios pasajes del Nuevo Testamento se abrevia, se condensa y se revela la relación entre JESÚS Y MARÍA empleando siempre la expresión SU MADRE (cf. Mt 1, 18; 2, 11. 13-14. 20-21; Mt 12, 46; 13, 55; Lc 2, 34. 51; Jn 19, 25-26) obliga a la necesidad de releer y de interpretar de manera muy distinta de como lo plantea este hermano protestante y la mayoría de las sectas, el hecho de que Jesús use para su madre el término de MUJER. Exige poner esa palabra en el contexto y lugar teológico que en todo el arco de la Historia de la Salvación, y no literalmente, como lo suelen hacer las sectas. ¿No crees que si Jesús – en su condición divina – se hubiese desligado y desvinculado abiertamente de María para que nadie le diera el título de madre de Dios, Él mismo habría hecho que los autores bíblicos no la presentaran como “SU MADRE”, sino del otro modo, con la palabra MUJER? La conclusión lógica y natural sería: a María Jesús le da el título de MUJER, para indicar que la plenitud de los tiempos llegó, que María es parte de ese Plan, por ser, justo, la MUJER anunciada a Eva y a la serpiente en el Paraíso en Gn 3,15; y hace que los hombres que los evangelistas la presenten como SU MADRE, para confirmar lo anterior: LA MUJER Y SU SIMIENTE.
Juan recibió a María en su casa porque ya ella estaba anciana y para consolarla , no para que María cuidara de él. Los hermanos físicos de Jesús no creían en él, además es el único apóstol que estuvo con Jesús en la cruz.
Es falso que María era anciana cuando Jesús murió en la cruz. Tenía alrededor de 52 años. Fue a sus 15 años de edad cuando nació Jesús según el Protoevangelio de Santiago, sin embargo según los años en que gobernaron los césares, hay una diferencia de 4 años, por lo que Jesús habría muerto a la edad de 37 años y no a la de 33 años. El ejercicio matemático lleva fácilmente a la deducción de que ella tenía esa edad: 52 años. Ciertamente, como madre carnal, Juan no necesitaba a María como madre, porque ya tenía a su madre que lo parió, Salomé, quien por cierto, también estaba allí al pie de la cruz (Mc 10, 35; Mt 27, 55-56; Mc 15, 40; 16, 1) cuando Jesús le encargó a María cuidar de Juan, y a Juan, recibir a María por madre. Juan necesitaba a la madre de Cristo como madre espiritual, porque carnal, ya Juan tenía la suya. La necesitaba espiritual para que lo ayudara a permanecer fiel en la palabra de Cristo así como ella lo fue siempre fielmente. Es allí donde Juan nos representa a todos los cristianos, a todos los bautizados. Necesitamos una madre que nos enseñe sobre Cristo, y que lo conozca perfectamente, para que nos proteja de seguir falsos cristos y a falsos profetas; y una madre santa, para que nos ayude y enseñe con su ejemplo a recibir santamente a Cristo.
María, lejos de ser objeto de oración, sintió como los discípulos la necesidad de orar a Dios, se convirtió y fue una fiel discípula de Cristo ( Hechos 1:14).
¡Respecto a esto, ya es maíz trillado!. Que lea lo anterior y tendrá la respuesta.
REFÚTEME CON CAPITULO Y VERSÍCULOS A LA LUZ DE LAS MISMAS ESCRITURAS, NO CON RISAS SARCÁSTICAS
Complacido con las respuestas que pidió.
Quiero felicitar al hermano protestante que publicó todas esas preguntas sobre María, porque el más ignorante no es el que pregunta, sino que se calla sus preguntas. Porque, quien pregunta puede ser ayudado. en cambio, el que se queda callado no saldrá de su tiniebla de ignorancia.
(1) Breve Catecismo Mariano; TÉRMINOS Y CONCEPTOS A ACLARAR; https://corredentores.wordpress.com/breve-catecismo-mariano/
