VIII Domingo del T. Ordinario
*Lecturas del día:* Sir 27, 4–7; Sal 92, 2–3, 13–16; 1Cor 15, 54–58; Lc 6, 39–45
*Comentario:*
“De lo que rebosa el corazón habla la boca” (Lc 6,45)
No todo el que habla de fe, esperanza, de paz o de Dios, es bueno (cf. Mt 7, 15).
Infortunadamente está de moda, crear un Dios a la medida (cf. Lc 6,45; Mt 15, 11), con teorías y obras, aparentemente buenas (cf. Mt 7,15) casi hasta creerse dios mismo; o hacer una interpretación unilateral de la Palabra, hablar en el nombre de Jesús y fundar iglesias (cf. Mt 15, 8).
¿Será aceptable ante los ojos de Dios, negar a Dios mismo, su creación, su Iglesia? (cf. Sb 9, 9). ¡Ojo con la oferta tentadora de la serpiente! ¡SERÉIS COMO DIOSES! (cf. Gén 3, 4-5). ¿O es que en verdad olvidaste que Dios existe?, ¿Qué hay en tu corazón? cf. (Lc 6,45).
¿Cómo estás seguro que tu boca predica la verdad?
Si censuras los dogmas de Fe más grandes del Misterio más hermoso de la Salvación: La presencia real y viva de Jesús en la Santa Eucaristía (cf. Mt 26, 26-28), la pureza y castidad de la Madre de Nuestro Señor (cf. Lc 1, 30), la santidad, el ejemplo de vida de aquellos que caminando hicieron proezas en el nombre del Señor (cf. Lev 11, 44), la unción del Sacerdocio (cf. Is 66, 18-21; Ex 29, 44.), el Sacramento de la Confesión (cf. Jn 20, 22-23)…y muchas cosas más, disque, por el mal testimonio de algunos o interpretando la Palabra de Dios según su propio querer.
¡Hermano qué fácil es medir tu fe!
Has permitido que tus oídos escuchen desatinos doctrinales y los has seguido, negando incluso la cuna donde Dios te trajo a este mundo (cf. Eclo 27, 7),
¿Dios se equivocó, cuando permitió que nacieras en una familia católica?
Has reflexionado sobre el propósito de aquellos que interpretando la Palabra de Dios, dividen, atacan y hasta irrumpen de manera irrespetuosa en la historia de la Iglesia fundada por el mismo Señor Jesucristo. Y: ¿La salvación del alma? (cf. Lc 6,39), ¿Cómo es que dejas que siembren dudas y te saquen del camino que nos lleva a la Gloria de Dios?, ¿a quién escuchas? O es más ¿Cómo permites que tu propio ego te saque de la Iglesia del Señor? Y todo por no atenderlo cuando nos exhorta a oír para conocer (cf. Eclo 27, 7)
¡Dios hace grandes proezas por amor a ti y no le crees!
*Para compartir:*
1. ¿Cómo hablas cuando te refieres a la Iglesia del Señor?
2. ¿A quién escuchas? ¿a quién le crees? ¿Estás escuchando a la persona correcta?
*Elaborado por:*
Mabel Hernández, mfc