Con esta publicación, Hospitalitos de la Fe inicia una serie de orientaciones acerca de cómo superar y acompañar este caso tan difícil y sensible, desde la óptica de reconocer que el aborto es un pecado, ya que, entre muchas razones, lesiona y atenta gravemente la continuidad y la esperanza de la vida humana. Nos servirá de apoyo la Guía de Auxilio Espiritual, elaborada por un equipo conjunto de especialistas coordinado por esta Red Misionera.
¿Qué debes saber sobre el aborto? ¿Crees que el aborto inducido es una respuesta ante la vida de un ser indefenso? ¿Cómo superar esta abominable acción que las élites y sus tentáculos quieren que veamos como algo normal?
Abortar es sinónimo de asesinar.
En palabras del padre Jorge Loring, «se llama aborto a la interrupción del embarazo cuando el feto todavía no puede sobrevivir fuera del seno materno». (1)
Éste puede suceder de dos modos, espontáneo o intencionado. En el primer caso, hay ocasiones donde la mujer se siente mal porque cree que ha cometido un pecado muy grave, porque lo ve como un aborto igual al cualquier aborto. Hay que ayudarle a distinguir que el suyo no fue un asesinato, que ella no es ninguna homicida. Que el bebé murió por causas ajenas a su voluntad.
El subtítulo que acabas de leer es muy fuerte, pero no se puede llegar a un buen final si se finge la realidad al comienzo con eufemismos que ocultan la sinceridad de los hechos. Cuesta llamar las cosas por su nombre y más en este caso, porque allí se puede estar viendo, manifiesta o encubiertamente, la propia conciencia oscura, el propio pecado al descubierto o con una herida escondida o negada; ¿cómo se le podría sanar y ayudar?
La caridad necesita la verdad para que sea caridad; pues la mentira viene del maligno y con el maligno a nada bueno se puede ir, sino a más destrucción, dolor y muerte. Por eso, comencé este tema exponiendo qué es realmente el aborto. Si no se abordan las situaciones difíciles, tal cual ellas son, lejos de llevar a las personas liberación y paz, se las empuja hacia nuevas frustraciones y a sumar más dolor del que ya tienen.
Estamos ante una generación, en una época en la que para muchas personas o grupos ligados a la agenda pro-aborto, abortar es algo bueno y justo, al punto que tildan esa agenda como una lucha o una conquista por los «derechos humanos». Un ejemplo: hay una empresa trasnacional, Planett Parenthood y filiales, que tiene su negocio principalmente en el asesinato de bebés y se llama «Pro-familia». Por el solo nombre se saca todo. «¡Abortar, un servicio a la familia!». ¡Así lo ven! Por eso, no faltará quien piense que lo que acá está escrito es malo y una amenaza para la sociedad.
Para compartir:
1.- ¿Qué es el aborto y de qué modos puede suceder?
2.- ¿Por qué es necesario abordar el tema del aborto con objetividad, sin eufemismos ni camuflajes que endulcen la conciencia?
Autor:
Pbro. Héctor Pernía, mfc
Fuente:
(1) LORING, Jorge, S.I; «Para Salvarte»; 56ª edición; JL Ediciones Católicas; México, marzo 2004; Pág, 564