Bruno, cuyo instituto religioso está por encima de todos los demás, los llama «el gran milagro del mundo: viven en el mundo como si estuviesen fuera de él; son ángeles en la tierra, como Juan Bautista en el desierto».
San Bruno fue profesor de filosofía y teología en la escuela de Reims, donde mantuvo durante 18 años, un alto nivel en los estudios. Después fue nombrado canciller en la diócesis por el arzobispo Manasés, quien era un personaje indigno de llevar ese alto cargo.
La Iglesia considera la vida de los Cartujos como el modelo perfecto del estado de contemplación y penitencia. Sin embargo, cuando se estableció en Chartreuse, no tenía la menor intención de fundar una orden religiosa. Si sus monjes se extendieron, seis años más tarde por el Delfinado, ello se debió, después de la voluntad de Dios, a una invitación que se les formuló. El conde Rogelio, hermano de Roberto Guiscardo, regaló al santo el fértil valle de La Torre, en la diócesis de Squillace. Ahí se estableció San Bruno con algunos discípulos…
Falleció: el domingo 6 de octubre de 1101.
Fuentes: https://www.aciprensa.com/santos/santo.php?id=299
Fecha: Sábado, 06 de Octubre del 2018