*Lecturas del día:* Jos 24, 1 – 13; Sal 135; Mt 19, 3 – 12
*Comentario:*
En nuestro caminar dentro del Año Litúrgico, hoy escuchamos textos de la Palabra de Dios que nos dan la oportunidad de profundizarla en aspectos de especial actualidad.
Es verdad que el Matrimonio y el Celibato están siendo actualmente atacados no sólo por fuera de la Iglesia de parte de la cultura existente, sino incluso dentro de ella. Pues hay propuestas que intentan rebajar la Verdad que Jesús declaró sobre ambos estados de vida. Así, hay situaciones disfrazadas de Pastoral como la «Bendición» de Divorciados en Nueva Unión, de Uniones homosexuales, la Comunión a personas que no están en gracia, porque ahora se considera que invitarlos a vivir en abstinencia sexual por no estar sacramentalmente unidos es un atentado a su dignidad y no se privilegia el honor que a Dios le es debido. Lo peor de todo es que se alega que el Papa Francisco en Amoris Laetitia así lo dice, cuando no es así.
Por otro lado, el Celibato, carisma que Dios da a quien llama en la Iglesia Católica de Occidente al sacerdocio ministerial, está siendo tratado como un impedimento para el acceso a la fe de los hombres del siglo XXI, como la causa original de los abusos sexuales y como una expresión de la hipocresía de la Iglesia porque hay sacerdotes que lo prometieron en su Ordenación Diaconal y no lo viven con fidelidad. Más aún, hay voces no sólo de Pastores Protestantes, sino, incluso de Sacerdotes y Teólogos que exponen un sin fin de razones en contra, más no lo que Jesús afirmó al respecto.
Como las Palabras de Jesús permanecen para siempre, todos los falsos argumentos que se ocupan para debilitar el Matrimonio y destruir el Celibato no son expresión auténtica de la Voluntad de Dios, más bien son la expresión actual de la DUREZA DEL CORAZÓN que se manifiesta en cada persona que quiere vivir pecando incluso bajo apariencia de estar obedeciendo a Dios como lo hacían los Fariseos del pasaje del Evangelio.
Por tanto, basémonos sola y totalmente en la Divina Revelación que el Señor hizo sobre ambas vocaciones, que son 2 formas auténticas de la Fidelidad y de la entrega de Dios por su Iglesia y el Mundo y que el Reino de Dios se instaure en el corazón de cada bautizado para que dando testimonio de configuración con Jesús, este Reino alcance a más y más personas.
*Para compartir:*
1-. _¿Vives tu Vocación como expresión de la Fidelidad de Dios?_
2-. _¿Tendrá relación la Crisis de Fe con la Fidelidad entre las parejas actualmente?_
*Elaborado por:*
Christopher Cortés, mfc
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