Lecturas del día: Optativas…
Comentario:
¿Para qué rezar por los difuntos?
Así sorprenden y dejan boquiabiertos a muchos padres de familia católicos, los hijos y nietos que prefirieron creerle más al paganismo y a las sectas que niegan el Purgatorio.
¿Lágrimas?, nunca falta quien las haga notar; y flores y ropas negras, tampoco faltarán; pero, ¿orar por las almas de sus difuntos?, a eso, qué triste que haya quienes lo consideren inútil y perdedera de tiempo. Decía San Agustín: “Una flor sobre su tumba se marchita, una lágrima sobre su tumba se evapora, una oración por su alma la recibe Dios”
La frialdad y la indiferencia hacia las almas de los difuntos ha crecido tanto que, incluso, se dejaron invadir por ella muchas sectas que dicen llamarse cristianas. Asista a una reunión de una donde estén velando los restos de un difunto y verás que no hacen ni una oración por su alma. Todo se va en un hablar sobre ellos y Jesucristo, según dicen ellos. Pero, ¿por qué se olvidan del difunto teniendo delante sus restos y el dolor de sus familiares? Lo hacen por su ignorancia en la fe y por ceder a la mundanidad de una sociedad que se aparta cada vez más de Dios.
Tildan de apócrifo y anti bíblico, con argumentos muy superficiales, el libro I y II de los Macabeos, para así eludir el texto doctrinal sobre el Purgatorio y la oración por los difuntos que, con mucha claridad se encuentra en 2Mac 12, 41-46. ¿Qué cara pondrán cuando se enteren de que éstos, y el resto de los libros deuterocanónicos estuvieron siempre ante los ojos de nuestro Señor Jesucristo, de los Apóstoles y todos los primeros cristianos cuando escudriñaban e inspiraban sus pensamientos y sus actos en las Santas Escrituras? No tienen más argumento para negar la canonicidad de estos libros, que su sola soberbia y aversión a cuanto hagan o usen los católicos. ¿Es de Dios actuar así? ¡No!
Les presento este valiosísimo comentario sobre los escritos de san Agustín acerca de la Oración por los Difuntos (1):
“Además añades que no se puede olvidar que la Iglesia universal ha tenido la santa costumbre de pedir por los difuntos”. Por eso se consolida su opinión de “que no es inútil el cuidado de las almas piadosas y cristianas que se preocupan de todo esto en favor de sus difuntos”.
«Reconoce, por otra parte, que la conocida cita del Libro de los Macabeos es una afirmación aislada en la Sagrada Escritura. “Leemos en los libros de los Macabeos que fue ofrecido un sacrificio por los difuntos. Y, a pesar de que en ningún otro sitio del Antiguo Testamento se lee esto, no es poca la autoridad de la Iglesia universal que se refleja en esta costumbre, cuando, en las oraciones que el sacerdote ofrece al Señor, nuestro Dios, sobre el altar, tiene su momento especial la conmemoración de los difuntos”.
Fuente:
1] Documento en Línea: Manuel VILLEGAS RODRÍGUEZ; Mª del Carmen VILLANUEVA CUEVA; Tradiciones sobre los difuntos en San Agustín; San Lorenzo de El Escorial (Madrid); p. 50. https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/5043378.pdf
Para compartir:
1.- ¿Por qué debemos orar por los difuntos?
2.- ¿Qué fundamentos bíblicos evidencian que esta práctica es inseparable de la fe cristiana?
Elaborado por:
Pbro. Héctor Pernía, mfc
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