*Lecturas del día:* So 3, 14-18 o bien Rm 12, 9-16; Sal Is 12, 2-6; Lc 1, 39-56.
*Comentario:*
En este día la Iglesia celebra un acontecimiento de gran riqueza espiritual y doctrinal sobre la madre de nuestro Señor Jesucristo. Nos referimos a la visita que María santísima le hiciera a su prima Santa Isabel. Pero no sólo lo recordamos en el evangelio de hoy: todo católico que reza frecuentemente el Santo Rosario recuerda y medita la visita de María a su prima Santa Isabel dos veces cada semana (en el segundo MISTERIO GOZOSO los días lunes y sábados).
En primer lugar, el pasaje evangélico de hoy, nos muestra una virtud de María que todos debemos imitar: Su disposición a servir. María no se queda «disfrutando para sí», la Gracia que Dios le concedió de ser madre de su Hijo, sino que –dice la Biblia- “se puso María en camino y con presteza fue a la montaña (…) y entró a casa de Zacarías y saludó a Isabel” (cf. Lc 1, 39-40). [1]
Como dijera el papa Benedicto XVI (en su alocución del 31 de mayo de 2010):
- “En la Virgen María que va a visitar a su pariente Isabel reconocemos el ejemplo más límpido y el significado más verdadero de nuestro camino de creyentes y del camino de la Iglesia misma. La Iglesia, por su naturaleza, es misionera, está llamada a anunciar el Evangelio en todas partes y siempre (…)”. [2]
En segundo lugar, este evangelio nos presenta un detalle que los no-católicos pasan por alto: Que Isabel –llena del Espíritu Santo- (cf. Lc 1, 41) llamó a María «Madre de mi Señor». Cualquiera que estudie el texto bíblico con seriedad, sabe que ya en aquellos tiempos se le llamaba SEÑOR a Dios. No obstante, para evitar dudas, le invito a leer detenidamente el relato de la aparición del Ángel Gabriel a Zacarías y luego a María *(Lc 1, 8-38)* donde notará que el evangelista dice que Gabriel es “el Ángel del Señor” (v.11) y –más adelante- el mismo Ángel dice de sí que él está “delante de Dios” (v.19). En consecuencia, Santa Isabel es la primera que reconoció a María como «Madre de Dios».
Finalicemos con unas sabias palabras de San Juan Pablo II:
- “El encuentro entre la Virgen y su prima Isabel es una especie de «pequeño Pentecostés». (…) la Virgen santísima, que lleva en su seno al Hijo concebido por obra del Espíritu Santo, irradia en torno a sí gracia y gozo espiritual (…). Donde está María, allí está Cristo; y donde está Cristo, allí está su Espíritu Santo, que procede del Padre y de Él en el misterio sacrosanto de la vida trinitaria”. *[3]*
*Fuentes:*
*[1]* _Biblia Nácar-Colunga_. Biblioteca de Autores Cristianos (1.977).
*[2]* Tomado de: https://www.vatican.va/content/benedict-xvi/es/speeches/2010/may/documents/hf_ben-xvi_spe_20100531_mese-mariano.html
*[3]* Tomado de: https://www.primeroscristianos.com/la-visitacion-de-la-virgen-maria-a-santa-isabel-31-mayo/
*Para compartir:*
1.- ¿Cómo explicarías el ejemplo Bíblico donde Isabel nos enseña a llamar a María «Madre de Dios»?
2.- ¿Qué consecuencias para la fe tiene ignorar esas palabras que dijo Isabel bajo la inspiración del Espíritu Santo?
*Elaborado por:*
Nelson Ledezma, mfc