VUELVE A DIOS
La tierra es sometida por el hombre. ¿Irá la ciencia en contra del don de la vida?
La ciencia y la Fe no se contradicen, «la ciencia sin la conciencia no conduce sino a la ruina del hombre» (1). Cuando se concibe a Dios como El Creador, podemos entender las ambigüedades que puedan existir entre la ciencia y la religión.
Es bien cierto que Dios usó la palabra <<Sométanla>> en otras traducciones Bíblicas se puede entender como <<Domínenla>>.
Cualquiera de los términos usados debe ser profundamente analizado de acuerdo a la Ley del Amor de Dios. Los avances que la ciencia lleva para el bien de la humanidad deben sumarse al bien y no al mal.
Citemos lo que dijo Dios:
▪️ Y dijo Dios: «Hagamos al ser humano a nuestra imagen, como semejanza nuestra» (Gn 1, 26)
▪️ Y los bendijo Dios con estas palabras: «sean fecundos y multiplíquense, y llenen la tierra y sométanla (Gn 1, 28)
La Iglesia como Madre y Maestra a través de nuestro Magisterio en las Instrucciones “El don de la vida” busca alertar y despertar nuestra conciencia para que seamos capaces de discernir cuando los avances científicos están al servicio de la persona, de sus derechos inalienables y de su bien verdadero e integral según el plan y la voluntad de Dios.
Cuando la ciencia se aparta de la Fe en Dios, es cuando se tergiversa su intencionalidad y es cuando la Ideología de Género la usa para sus firmes propósitos: el aborto, la pedofilia, la eugenesia, la eutanasia, el Post Humanismo o Trans Humanismo. Todo lo que conlleva a la sexualización de la persona, y finalmente a la destrucción de la familia como célula fundamental de la sociedad, por ende, a la anulación de los valores humanos que en definitiva es la Ley Moral Universal.
Todos los avances de la Ciencia que no dañen a las generaciones, son perfectamente bien recibidos por la Iglesia Cristiana Católica. No obstante, cuando “lesionan la dignidad de la persona, o se adoptan para finalidades contrarias al bien integral del hombre” no son moralmente aceptables. (2)
Es bien sabido que la investigación científica constituye una expresión significativa del señorío del hombre sobre la creación.
Sin embargo, desear tener un bebé no justifica su “producción”, como tampoco se justifica su asesinato o abandonarlo, sea cual fuese la causa que exponga la madre que lo concibe.
En síntesis, la ciencia debe estar al servicio de la persona humana, de sus derechos inalienables según el plan y la voluntad de Dios.
Fuente:
(1) Cardenal Joseph Ratzinger, Instrucción Donum Vitae (1987), Introducción. [bit.ly/InstruccionDonumVitae]
(2) Cardenal William Levada, Instrucción Dignitas Personae (2008), Primera parte. [bit.ly/InstruccionDignitasPersonae]
Para compartir:
1.- Las personas que no pueden tener un hijo y lo logran por manipulación genética, ¿estarán haciendo lo correcto? Argumenta tu respuesta.
2.- ¿Qué significa para ti ir en contra de la Voluntad de Dios?
Autor:
Loyo, Edgar. mfc.