Liturgia<📖>Apologética
De la Liturgia de la Palabra
3ra. Sem. de Adviento
Comentario:
En este quinto día de las Ferias privilegiadas de Adviento, la Iglesia invoca la Venida de Jesucristo con estas palabras; «Oh SOL que naces de lo alto, resplandor de la luz eterna, sol de justicia, ven a iluminar a los que viven en tinieblas y en sombras de muerte».
El título de esta invocación está inspirado en el texto del Libro del Profeta Malaquías 3, 20 en donde dice: «Pero para vosotros, los que teméis mi Nombre, brillará el sol de justicia con la salud en sus rayos, y saldréis brincando como becerros bien cebados fuera del establo». Así como también lo está en las palabras que San Zacarías, padre de San Juan Bautista, entona tras terminar de estar mudo.
Pues bien, con este símbolo Dios Padre quiso mostrarnos a su Hijo como Aquél que ha venido y que vendrá a traernos la Luz indeficiente, la Luz que no tiene fin y que puede darnos la Salvación.
Es interesante que para la mayoría de las culturas paganas, el Sol haya sido considerado como la deidad principal, sin embargo, era una deidad que siempre tenía que sufrir cada día el fracaso ante la noche. Interesante es al respecto el conjunto de mitologías que sobre este tema surgieron a lo largo y ancho de nuestro mundo.
Sin embargo, al nombrar al Mesías como Sol de Justicia, la Sagrada Escritura no hace una validación del culto al Sol, sino que retoma la figura como un símbolo y le marca una diferencia: este Sol, este Mesías, no nace de un extremo de la Tierra, sino que «nace de lo Alto» es decir, proviene de Dios.
Por esta razón es que la Iglesia conserva el símbolo del Sol para referirse a Jesucristo, más aún, el título latino es «O Oriens» , es decir «Oh Sol que te levantas de lo alto», ya no el astro que oculta su rostro a la tierra, sino que invocamos a Aquél que es Dios de Dios y Luz de Luz.
Cuando los Testigos de Jehová u otras sectas acusan a los católicos de idólatras por usar para la Exposición Eucarística, las Custodias en forma de Sol, lo único que manifiestan es su ignorancia sobre estos textos bíblicos y, por lo tanto, se nota también la ignorancia y la manipulación de sus pastores.
Que Cristo, el Sol que nace de lo alto, venga al corazón de cada uno de nosotros a fin de que también nosotros resplandezcamos como el sol en el Reino de su Padre.
Preguntas para compartir:
1. ¿En este día del Solsticio de Invierno, qué me inspira este título Mesiánico de Jesús?
2. ¿Qué significa entonces que Jesús es la «Luz del Mundo»?
Elaborado por:
P. Cristopher Cortés
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