XXXIII Semana del Tiempo Ordinario
*Lecturas del día:* 2M 6,18-31; Sal 3,2-3.4-5.6-7; Lc 19,1-10.
*Comentario:*
Debemos advertir, que no porque veamos a Eleazar, el escriba, oponiéndose ante un rey pagano a comer carne de cerdo para no violar la Alianza, para no faltar a Dios, eso significa que los cristianosm debamos actuar como él y abstenernos de comer sangre o grasas de animales, tal como piensan y enseñan algunas sectas como los adventistas, los mormones y los Testigos de Jehová.
Esta y otras obligaciones legales de la antigua Alianza desaparecieron con la nueva Alianza, y Cristo, que declaró que iba a fundar su Iglesia sobre la persona y el Ministerio de su apóstol Pedro, le reveló también que los cristianos estaban ya liberados de aquella prohibición. Abramos la Biblia y leamos: *Mt 15, 1. 17- 20; Mc 7, 15-20; Hch 10, 9-16; 11, 5-10*
Dísele a estos hermanos, lo que el ángel de Dios le dijo al apóstol Pedro, cabeza de los apóstoles:
_»La voz le dijo por segunda vez: Lo que Dios ha purificado no lo llames tú profano.»_ *(Hch 10,15)*
*Preguntas para compartir:*
1_ _¿Los que se mantienen aferrados a las leyes de la antigua Alianza son discípulos de Cristo?_
2_ _¿Qué cambios respecto de las leyes de la antigua Alianza trajo la nueva Alianza?_
*Elaborado por:*
Pbro. Héctor Pernía, mfc