2da. Sem. T. de Adviento.
Comentario:
¿Jesucristo es Dios? Los hechos narrados hoy, en el Evangelio (Lc 5,17-26), cumplen las profecías anunciadas en la primera Lectura, en Is 35,1-10. Es Jesucristo quien cumple, en exactitud, esta promesa:
«MIRAD A VUESTRO DIOS, que trae el desquite; VIENE EN PERSONA, resarcirá y os salvará. Se despegarán los ojos del ciego, los oídos del sordo se abrirán, saltará como un ciervo el cojo, la lengua del mudo cantará.»
¿Los sacerdotes tienen poder para perdonar pecados?
No hay que sorprenderse que, aún hoy, haya quienes no conciban ni comprendan que un sacerdote tenga poder para absolver pecados, si del propio Jesucristo, los letrados en las Sagradas Escrituras, decían:
-«¿Quién es éste que dice blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados más que Dios?»(Lc 17,21)
Pero, ¿pueden o no pueden perdonar pecados los sacerdotes? Es como en los asuntos civiles… Una persona cualquiera no puede sentenciar a otra persona a tantos años de cárcel, pero sí este poder se lo da el Estado, sí lo puede hacer. Así son los ministros de Cristo. Ellos sólos no tienen poder para perdonar pecados, pero si Cristo les da ese poder, no sólo es que lo pueden hacer, sino que además están mandados a predicar y a llamar a todos a recibir ese ministerio.
Preguntas para compartir:
1.- ¿Qué esperanzas de redención y vida eterna tendría la humanidad, si Jesucristo hubiera hecho muchos milagros, pero no hubiera sido Dios?
2.- ¿Por qué muchos que dicen ser cristianos, sí aceptan el poder de los jueces de este mundo, pero no lo aceptan de los ministros de Cristo?
Elaborada por:
Pbro. Héctor Pernía, mfc
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