- Liturgia< 📖>Apologética
De la Liturgia de la Palabra.
VI Semana de Pascua.
10 de Junio de 2018
Comentario: La Liturgia de este Domingo nos revela contundentes evidencias de varios contenidos de nuestra fe católica, con frecuencia considerados como anti bíblicos por hermanos no católicos. Veamos algunos de ellos:
a) Reducir a la Madre de Cristo a una mujer común y corriente como cualquier mujer. Sin embargo, en la primera lectura, en Gn 3, 15 Dios nos habla de ella y la anuncia como la vencedora, la que pisa a la cabeza de la serpiente, la que viene a reparar el error de Eva. Como escribió, en la antigüedad, San Ireneo de Lyon: “Y si aquella (Eva) se dejó seducir para desobedecer a Dios, ésta (María) se dejó persuadir a obedecerle con lo que la Virgen María se convirtió en abogada de la virgen Eva.” (1) Vale destacar que María es singular entre todas las mujeres, ya que es la única mujer de la que Dios hace grandes anuncios muchos siglos antes que naciera; y la única de la cual dijo que establecería enemistad entre el diablo y ella.
b) ¿Reencarnamos o resucitamos? Es triste encontrar cristianos que hayan preferido creer en promesas de hombres que inventaron la doctrina de la reencarnación, y no crean en El Espíritu Santo, quien por medio de San Pablo nos revela y recuerda la promesa de Cristo, que nunca miente y tiene todo poder para cumplir lo que promete: “sabiendo que quien resucitó al Señor Jesús, también nos resucitará con Jesús y nos presentará ante él juntamente con vosotros.” (2Cor 4, 14)
c) Alerta con falsos cristianos que predican la enfermedad como un castigo o maldición por haber pecado. La segunda lectura nos da la enseñanza verdadera sobre la fragilidad del cuerpo humano: ”no desfallecemos. Aun cuando nuestro hombre exterior se va desmoronando, el hombre interior se va renovando de día en día. En efecto, la leve tribulación de un momento nos produce, sobre toda medida, un pesado caudal de gloria eterna, a cuantos no ponemos nuestros ojos en las cosas visibles, sino en las invisibles; pues las cosas visibles son pasajeras, más las invisibles son eternas. Porque sabemos que, si esta tienda, que es nuestra morada terrestre, se desmorona, tenemos un edificio que es de Dios: una morada eterna, no hecha por mano humana, que está en los cielos.” (2Cor 4, 18-18; 5, 1)
d) ¿Dónde sale en la Biblia que el Purgatorio existe? Si los que cometen pecados contra el Espíritu Santo no tendrán jamás perdón de sus pecados, aludiendo que van al infierno, ¿A dónde van entonces aquellos que mueren en pecados que no son contra el Espíritu Santo? Aquellos de quienes Jesús dijo: ”Yo os aseguro que se perdonará todo a los hijos de los hombres, los pecados y las blasfemias, por muchas que éstas sean.(Mc 3, 28) Imposible que esas almas al morir vayan al infierno, ¿verdad?, tampoco al cielo, pues nada impuro puede entrar en él (cf. Ap 21, 27). En conclusión, tales almas van al Purgatorio, donde deberán purificarse según está anunciado en 1Cor 3, 15-18
e) ¡Que la madre de Cristo tuvo más hijos! Eso es lo que algunos dicen, y de modo errado lo justifican con este pasaje bíblico: ”Llegan su madre y sus hermanos, y quedándose fuera, le envían a llamar. Estaba mucha gente sentada a su alrededor. Le dicen: «¡Oye!, tu madre, tus hermanos y tus hermanas están fuera y te buscan.»” (Mc 3, 31-32). Se les llama hermanos, no porque sean hijos de su madre, sino porque eran sus parientes. El propio texto bíblico, un poco antes, lo dice: ”Se enteraron sus parientes y fueron a hacerse cargo de él, pues decían: «Está fuera de sí.»” (Mc 3, 21)
Antes de creer que es verdad todo lo que dicen sobre la Iglesia Católica aquellos que de ella se separaron, seamos prudentes en admitir que sabemos muy poco o nada de la sana doctrina que por siglos la Iglesia Católica ha enseñado.
Fuente bibliográfica:
San IRENEO DE LYON, (130 – 208 d. C.), Contra los herejes, 5, 19, 1; 20, 2; 21, 1).
Preguntas para compartir:
1-. ¿Cuál de las enseñanzas de esta publicación te llamó más la atención? ¿Por qué?
2-. ¿Qué harás desde hoy para conocer la enseñanza de la fe católica y darla a conocer?
Elaborada por:
Pbro. Héctor Pernía, mfc
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