Imágenes cristianas, medicina contra la idolatría

Lunes, XIV Semana del T. Ordinario

Lecturas del día: Os 2, 16–22; Sal 145, 2–9; Mt 9, 18–26.

Comentario:

Las palabras cargadas de ternura que Dios dirige a Israel para curarle de sus heridas de idolatría tras el dios Baal de los cananeos y otros pueblos, trae medicinas del cielo para sanar la ignorancia de las sectas que ven en las imágenes cristianas falsos dioses, y que inundan de gozo la fe de todos los católicos que se ayudan del recurso de las imágenes para no extraviarse mientras se esfuerzan en ser fieles a Quien no logran ver ni tocar porque escapa a sus sentidos:

1.- No ofendas a Dios poniendo como iguales a las imágenes paganas, con las imágenes cristianas:

n la primera lectura Dios le habla compadecido a Israel, al verlo extraviado adorando estatuas del dios Baal. Le dice a través del profeta Oseas: “Y sucederá aquel día – oráculo de Yahvé – que ella me llamará: «Marido mío», y no me llamará más: «Baal mío.» Retiraré de su boca los nombres de los Baales, y nunca más serán invocados por su nombre.” (Os 2, 18-19)

¿Crees que ese celo santo de Dios se repite cuando cualquiera de sus hijos reverencia, besa, lleva en sus hombros, o invoca su Nombre ante una imagen de Cristo, que exactamente representa al único y verdadero Dios, y no a otro? ¿Piensas, tal vez, que una imagen de la virgen María o de los Santos, te va a arrastrar hacia dioses falsos, siendo que la representación nos ayuda a comunicarnos con las almas de esos siervos santos que están en el cielo junto a Dios dispuestos a ayudarnos en lo que sea necesario para nuestra salvación?

Así como las imágenes de los querubines de madera y oro que hicieron los israelitas (cf. Ex 25, 18-23; 1Re 6, 23-29) les ayudaba a tener presente la existencia de estos seres en el cielo junto a Dios; del mismo modo, cualquiera de las imágenes cristianas vienen en auxilio a nuestros sentidos para ayudarnos a evitar el olvido de que junto a Dios han siervos santos que nos guían con el testimonio de vida que dejaron en la tierra y con el favor de sus oraciones en el cielo.

2.- Las imágenes cristianas ayudan al cristiano, justamente, a no extraviarse en el pecado de idolatría.

En una de mis canciones, hay una estrofa que dice: “Las señales de tránsito me llevan a la ciudad, sin ellas me puedo perder. También las de Cristo me llevan hasta Dios, sin ellas me puedo extraviar”

¿Por qué los israelitas se extraviaban tan fácilmente yendo a buscar otros dioses? Porque teniendo sentidos en su corporeidad, y siendo Dios sólo espíritu, eran muy propensos a perderse y se les hacía difícil encontrarlo. Pero, la misericordia de Dios acudió en su ayuda: se encarnó, se hizo hombre; y, entonces, permitió que el hombre le pudiese ver, tocar – como la hemorroísa del evangelio de hoy (cf. Mt 9, 18-26) – contemplar y, por ello, representar mediante una imagen, para que así la nueva Jerusalén, su esposa, pudiese ver a su Esposo, hablarle, permanecer fiel y tener un apoyo santo para no dejarse seducir por los actuales y futuros ídolos que el mundo se inventase.

Las imágenes cristianas hablan de la comprensión de Dios. Al ver su rebaño extraviado yendo tras los ídolos porque no logra ver a su Pastor, permite y bendice aquellas imágenes que conduce a todas sus ovejas hacia su encuentro.

Para compartir:

1.- ¿Qué crecimiento en la fe te ha dejado esta publicación?

2.- ¿Qué frutos en la fe les ha dejado a los que eliminaron de su vida cristiana las imágenes?, ¿más unión, o más división?

Elaborado por:

Pbro. Héctor Pernía, mfc

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