*Lecturas del día:* Ne 8, 1–12; Sal 19, 8–11; Lc 10, 1–12.
*Comentario:*
La primera lectura y el santo evangelio de hoy hacen una llave de un mismo mensaje para nosotros en estos tiempos: el llamado a volver a la Palabra de Dios.
¡Cuantos se excusan de haberse ido de la Iglesia Católica, inventando que en ella no le leían la Biblia, y ahora donde se fueron si la leen! Recuerdo una publicación de una plantilla en la que un adolescente cada vez que estaba en Misa y proclamaban los textos de la sagrada Escritura dormía sobre el banco; y, años más tarde, se cambió y se fue a una secta protestante. Un día, el dirigente invitó a quien quisiera dar algún testimonio. El joven se paró y dijo que estaba muy feliz, porque al fin le leían la Biblia. Dijo que cuando católico nunca se la leían.
Así son las cosas. No fue capaz de decir que cuando iba a misa se dormía mientras le proclamaban la Palabra de Dios. A ese joven le hacía falta lo que sucedía a los israelitas cuando les leían los textos sagrados: volver a sus raíces y emigrar de la superficialidad.
Comentando este pasaje de Nehemías, el Papa Francisco animó a reencontrar la propia pertenencia…. Hablaba de cómo Nehemías sentía profunda necesidad y anhelo de volver a su tierra para ayudar a su pueblo a encontrar sus raíces en Dios, y expresó, que mientras no encuentre sus propias raíces, un pueblo está enfermo.(1) Basta notar cómo recobró su salud y su fe el pueblo de Israel cuando Esdras les leía los textos sagrados: lloraban, se emocionaban, se llenaban de avivamiento.
El envío de Jesús a los 72 discípulos a predicar, representa, de algún modo, el llamado ser nuevos Nehemías de hoy, a sentir, como él, la necesidad y el anhelo de volver a nuestras raíces. ¿Cómo no hacer presente al Papa emérito Benedicto XVI, con su santo y ejemplar testimonio de guiarnos a buscar nuestros fundamentos en la fe?
La gran mayoría de los católicos que desertaron de la Iglesia vivían como dice el título: como árboles sin raíces. Desconocían su Iglesia madre, ignoraban su fe. Hoy los hay en abundancia, y de no ser atendidos, serán muchos más los árboles que van a caer en alguna secta. Necesitan de personas como Nehemías y Esdras, que alienten, enseñen y expliquen con sencillez y claridad la fe verdadera. Es intenso el clamor de necesidad, en estos tiempos, de ministros de Dios que adviertan del espejismo y peligro escondido en miles de sectas que aparecen atendiendo y socorriendo cuanta necesidad tienen, como señuelo para apartarlas y llevarlas fuera, a otros rediles que los apartan de la plenitud de los medios de Salvación.
La falta de raíces en la fe, en la gran mayoría de la población católica, los hace marionetas y fáciles víctimas de los mercaderes de la fe. Como dijo en una ocasión el papa emérito Benedicto XVI: _”Sin el conocimiento de Dios, el hombre se hace manipulable.”_ (Viaje apostólico a Alemania, 22-25 septiembre de 2011)
*Fuente:*
(1) https://www.aciprensa.com/noticias/una-persona-que-ha-olvidado-sus-propias-raices-esta-enferma-dice-el-papa-22240
*Preguntas para compartir:*
1) _¿Qué acciones se hacen necesarias hoy para que el pueblo bautizado se reencuentre con sus raíces en la fe?_
2) _¿Qué opinas sobre la iniciativa de Hospitalitos de la Fe, de conmemorar cada 17 de Octubre, día de San Ignacio de Antioquia, el día del Fortalecimiento de la Fe Católica?_
Elaborado por:
Pbro. Héctor Pernía, mfc